Esta receta de tarta Sacher es fácil aunque requiere su trabajo.
Para una tarta grande (Unas cuantas porciones majas, aproximadamente para 10 o 12 personas) vamos a necesitar:
Para preparar el bizcocho:
·6 huevos
·130g de chocolate (Negro)
·130g de mantequilla
·200g de azúcar
·1 sobre de levadura (Unos 15g)
·130g de harina
·Una pizca de sal
·Esencia de vainilla
Para el relleno:
· Un bote de mermelada de fresa (500g aprox)
Para la cobertura:
·300g de chocolate negro de repostería
·80g de mantequilla
·250g de azúcar
·120ml de agua
Preparación:
Antes de nada, vamos a separar las yemas de las claras de los huevos para el siguiente paso y vamos a precalentar el horno a 180º.
Derretimos el chocolate para el bizcocho al baño maría. Cuando este derretido añadimos la mantequilla y las yemas de huevo, batiendo sin parar para que no se cuajen con el calor. Añadimos también esencia de vainilla al gusto.
A continuación montamos las claras junto con el azúcar. Cuando estén montadas, añadimos la mezcla del chocolate con las yemas. Teniendo cuidado de que no se nos bajen las claras montadas.
Por ultimo, añadimos la harina, la levadura y la sal. La mejor forma de hacerlo es mezclándolas antes y tamizándolas para evitar que después queden grumos feos en el bizcocho.
Engrasamos un molde y echemos la mezcla. Horneamos el bizcocho alrededor de una hora, aunque es conveniente ir pinchándolo 10 minutos antes para controlar si esta hecho.
Lo dejamos enfriar antes de cortarlo por la mitad, para que no se nos rompa.
Vamos a volver a meter la tarta en el molde, tanto para rellenarla como para congelarla después.
Cuando este frió partimos por la mitad el bizcocho, y cambiamos la tapa por la parte de abajo (que habrá quedado mas plana) para que después, a la hora de echar la cobertura, quede mas liso y no se nos vaya el chocolate hacia los lados.
Cubrimos con una capa generosa de mermelada de fresa (o al gusto, claro esta) y reservamos un poquito (unas dos cucharadas) para empapar bien la tapa y que nos quede jugosa. Ponemos la base del bizcocho como tapa, siempre dejando la base hacia arriba, lo mas liso.
Con la mermelada que hemos guardado hacemos un almíbar, echando otras dos cucharadas de agua en el mismo bote de la mermelada y calentándolo unos minutos al microondas. Con este jugo empapamos bien la parte superior de la tarta.
Cuando tengamos la tarta lista, cubrimos bien el molde con papel film (para que no coja olores ni se estropee) y la metemos al congelador. Si tenemos tiempo es preferible dejarla de un día para otro porque sera mas fácil de manejar la cobertura.
Al día siguiente o cuando la tengamos bien fría, preparamos la cobertura.
En un cazo colocamos el agua y el azúcar. Cuando estén bien disueltos añadimos el chocolate, controlando la temperatura para que no se queme el chocolate. Por ultimo añadimos la mantequilla.
Con la tarta fuera del molde, la bañamos con la cobertura. Para que quede mejor y sea mas fácil, podemos colocar la tarta sobre una base elevada con una bandeja o un papel desechable debajo. Así, podemos verter todo el chocolate encima y se cubrirá todo de igual manera. Al estar congelada, el chocolate se cuajara rápido y quedara perfecta,
Por ultimo, la decoramos al gusto. Yo ralle unas virutas de chocolate y las coloqué por encima. Aquí, imaginación al poder.
Y eso es todo, lleva su tiempo, pero merece la pena totalmente!!
Y este fue mi resultado final:
